La vida después de una histerectomía

La histerectomía o extirpación del útero, es una de las cirugías ginecológicas más comunes. Aunque sus razones varían, desde cáncer hasta fibromas o endometriosi, el procedimiento implica importantes cambios físicos y emocionales.

Después de la cirugía, el proceso de recuperación puede variar según el tipo de histerectomía realizada y la salud general del paciente. Es común experimentar dolor, inflamación y fatiga. Dependiendo de la técnica utilizada (abdominal, vaginal o laparoscópica), el tiempo requerido para retomar actividades cotidianas varía, pero en general, es prudente evitar levantar objetos pesados ​​y realizar esfuerzos durante varias semanas.


Si además de la histerectomía, se extirpan los ovarios (ooforectomía), la mujer entrará inmediatamente en la menopausia, independientemente de su edad. Esto puede conllevar síntomas como sofocos, sudoración nocturna, sequedad vaginal y cambios de humor. En algunos casos, la terapia de reemplazo hormonal puede ser útil, pero es vital discutir los riesgos y beneficios.


La eliminación del útero puede tener un impacto en la vida sexual de una mujer, pero no necesariamente de manera negativa. Algunas mujeres reportan una disminución de la sensación durante el acto sexual, mientras que otras dicen experimentar lo contrario. Esto varía considerablemente.


La líbido puede verse afectada temporalmente, especialmente si se extirpan los ovarios. Sin embargo, muchas mujeres encuentran que después de recuperarse completamente, su deseo sexual se mantiene o incluso mejora, especialmente si el motivo de la cirugía estaba relacionado con dolor o problemas ginecológicos.


Una ventaja es que las mujeres ya no tendrán períodos menstruales, lo que puede ser un alivio para aquellas que sufrían menstruaciones dolorosas o abundantes.


Una histerectomía también puede tener un impacto emocional profundo. Algunas mujeres sienten una sensación de pérdida o duelo, especialmente si aún desean tener hijos. Es importante permitirse el tiempo necesario para procesar estas emociones y si es necesario, buscar apoyo psicológico.